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miércoles, 12 de agosto de 2009

Reta Felipe Calderón: no hay un solo caso impune de violación de derechos humanos

Quienes señalen lo contrario deberán probar que la autoridad no ha sabido responder, dice

Fuente: La Jornada de Jalisco

GEORGINA SALDIERNA, CLAUDIA HERRERA

El presidente Felipe Calderón retó a quienes denuncian violaciones a derechos humanos en la lucha contra el narcotráfico, a que presenten “un solo caso” de policías, soldados o cualquier otra autoridad que no haya sido castigado por este motivo.

Mientras el presidente estadunidense Barack Obama confió en que el gobierno de Calderón aplicará la ley para detener el poder de loscárteles de manera congruente con los derechos humanos y en que los cuerpos de seguridad reciban la capacitación necesaria.

En el cierre de la Cumbre de Líderes de América del Norte, Obama aseguró que su país seguirá apoyando la Iniciativa Mérida con la transferencia de equipo, aunque no aclaró qué ocurrirá con el 15 por ciento de los recursos, cuya entrega fue condicionada en el Congreso estadunidense a la presentación de un informe del Departamento de Estado sobre la situación de la lucha contra la delincuencia y los derechos humanos en México.

Obama explicó, en la conferencia de prensa conjunta ofrecida en el Instituto Cultural Cabañas, que los dos mandatarios abordaron el tema en sus reuniones bilaterales y se declaró confiado en que “en coordinación con los funcionarios del Ejército y de la policía, (en México) se mejorará y habrá cada vez más rendición de cuentas y transparencia y se van a observar los derechos humanos”.

Para el demócrata, “los mayores violadores de los derechos humanos, por supuesto, son los de los cárteles de narcotraficantes que están secuestrando y que están fomentando la corrupción en nuestras regiones. Y eso es lo que hay que detener”.

Como en su primera visita a México, el demócrata elogió el “esfuerzo sumamente valiente” de Calderón, reiteró su apoyo y que Estados Unidos continuará sus esfuerzos para reducir la demanda de droga y ampliar la seguridad en la frontera para proteger a los estadunidenses y evitar el flujo de armas.

Tras recibir el espaldarazo de su homólogo, Calderón reiteró, como en otras ocasiones que su gobierno es “escrupuloso” en proteger los derechos humanos. Fue cuando lanzó el desafío a sus críticos: “Y quienes señalen lo contrario, están obligados a probar un caso, un solo caso en que no haya actuado la autoridad, en que se hayan violado los derechos, en que no hayan respondido las autoridades competentes para castigar a quienes hayan abusado de sus competencias legales: sean policías, sean soldados o cualquier otra autoridad”.

Aseguró que su administración tiene un compromiso claro con los derechos humanos, lo ha cumplido y lo seguirá cumpliendo no por el dinero que pueda venir de la Iniciativa Mérida ni porque lo pida o lo deje de pedir un congresista estadunidense.

En la Declaración Conjunta de los líderes de la región, Canadá y Estados Unidos también reconocieron los “sacrificios” del pueblo y del gobierno mexicanos en el combate a los cárteles y acordaron llevar la colaboración en esta materia más allá de México y para ello explorarán alternativas con sus vecinos de Centroamérica y el Caribe.

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